Lugar: Museo Bibat. Auditorio (Salón de actos) Fecha y Horario: 7 de noviembre de 2024 (jueves), 19:30 (castellano) Público: todos los públicos Duración: 45 minutos No es necesaria la inscripción, hasta completar aforo. |
En el imaginario griego el agua –caracterizada por su mutabilidad y capacidad de transformación, pero también por su inestabilidad y ambivalencia– está cargada de simbolismos, algunos de los cuales perviven todavía en la actualidad. Además, el estudio de la mitología y de muchos textos de la literatura griega revela que tanto las sequías como las inundaciones eran habituales en la Grecia Antigua. En una sociedad de carácter tradicional y eminentemente agrícola, la sequía era un problema grave que requería cruentos sacrificios, así como la instauración de cultos y rituales dedicados a pedir el favor de los dioses. Además, muchos son los testimonios que hablan de movimientos migratorios forzados por la falta de humedad y de comida, una circunstancia que motivó el asentamiento de los griegos en muchas zonas del Mar Negro y del Mediterráneo. En cuanto a las inundaciones, los mitos griegos hablan de grandes diluvios enviados por los dioses para purificar la tierra y castigar la hýbris o soberbia de los seres humanos, mientras que, en otras ocasiones, las fuentes advierten de la lucha de las poleis griegas contra las inundaciones que las anegaban de manera recurrente y tampoco faltan historias que hablan de grandes olas marinas que inundaban la tierra provocando grandes catástrofes.
Pues bien, la conferencia estará dedicada, de un lado, a dar a conocer la imaginería en torno al agua, es decir, su representación divina o su valor ordálico y regenerador, y, de otro lado, a mostrar los efectos de las sequías y de las inundaciones en Grecia Antigua y el esfuerzo técnico implementado para superar esas dificultades: trabajos de canalización, construcción de pozos y cisternas, así como labores de desecación y edificación de diques y presas.